Por regla general, cuando caemos enfermos o sufrimos un accidente, solemos adoptar el papel de “victimas” más que de “actores”.
Si bien es cierto que para conseguir una terapia efectiva es necesario que el enfermo adopte una actitud resignada y obediente, no es menos cierto que una actitud dinámica y positiva puede ayudar tanto o más a su recuperación.
Paul Tournier, 157 pp.
0
0 opiniones