Cuando estudiamos la Historia de la Iglesia descubrimos que muchas personas que admiramos han destacado por desarrollar principalmente dos actividades: practicar la oración y tener un tiempo devocional diario. Hay quien aprovecha las mañanas y otros son más de leer y orar por la noche. La cuestión es que si practicar estas dos actividades ha sido de bendición para muchas personas, podemos estar seguros de que son importantes para nosotros. Hay quien usa el tiempo devocional leyendo la Biblia y otros siguiendo una lectura diaria preparada en un libro devocional.
Generalmente los libros devocionales están preparados con una estructura diaria más práctica para que cada día del año tengamos algunos versículos, una reflexión y muchas veces oraciones para que el Señor nos ayude a seguir las recomendaciones de las personas que escriben los devocionales.
Hay devocionales especialmente pensados para niños, jóvenes, para mujeres, hombres y hasta para matrimonios y familias. Es interesante el abanico de posibilidades para poder leer un devocional diario porque así es más sencillo acercarnos a Dios cada día, incluso muchos tienen un plan de lectura para leer la Biblia en un año.
