Política y religión para este nuevo siglo

Vivimos en tiempo de gran necesidad

¿Cuál es la mejor manera de ejercer infliencia y producir cambio en la sociedad y la cultura?

"Es necesario pasar de la inercia religiosa a una real aportación espiritual, moral y cultural en una sociedad herida y desorientada", escribe el autor con el mismo ímpetu con que denuncia la apatía, el apocamiento, los prejuicios y la religiosidad que han impedido a muchos creyentes ver más allá de las cuatro paredes de su iglesia local.

El autor hace uso magistral de ejemplos bíblicos prominentes como José, Moisés, Nehemías, Ester y Mardoqueo, Daniel, Pablo y muchos otros, para ilustrar la metodología y propósito último de Dios con la incursión política de Sus siervos, a saber, la salvación de Su pueblo y el establecimiento de Su reino. Asimismo, aplica la enseñanza bíblica al ejercicio de los deberes cívicos y políticos en la actualidad.

Vivimos en tiempos de gran necesidad, y ante el aumento sin precedente de la corrupción, la violencia y la desintegración familiar, los creyentes deben entender la dimensión espiritual de esta situación y su gran responsabilidad como depositarios de la Gran Comisión.