Que nuestro mundo está enfermo no necesita discusión. Lo que sí se necesita es ayudar a las familias de nuestro tiempo a mantener su salud, o a luchar por lograrla, en medio de un ambiente tan nocivo para la salud familiar.
Este libro se propone ser bendición a tantas personas que luchan en la vida cotidiana y desde el anonimato, para hacer de sus familias verdaderas células en un mundo social paganizado. Que donde haya crisis familiar, haya logros de victoria por el poder sin igual del evangelio de Jesucristo.
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