Te invito a sumergirte en la fascinante intriga en la que se aventura un grupo de jóvenes donde se declaran asesinatos, libros escondidos, enigmas por descifrar, un espía del Mossad, peligrosos enemigos, y una mezcla de sinsabores, amor y sentido del humor en la apacible levedad del ser de Lillo, pueblo de La Mancha que ha servido de inspiración a su autor. Pareciera que por las inmaculadas paredes de sus calles nunca podría atisbar-se un borrón, como en tantos pueblos de la Península, pero nada más alejado de la realidad. El pozo más oscuro y el tesoro más resplandeciente, pueden estar ocultos más cerca de lo que pensamos, y no hay nada mejor que participar de su descubrimiento, mientras la curiosidad crece por momentos esperando una justa resolución. Así es la lectura de estas páginas, como lo es también la alegría de encontrar los tesoros que contiene la Biblia que alumbran el corazón. Es motivo de satisfacción presentar libros como el que nos ocupa dado que a buen seguro incitarán los sentidos, y promoverán la lectura de la Biblia y de otros libros que nos hagan tomar decisiones acertadas.