La personalidad de Zuinglio centra y cristaliza todo el esfuerzo reformador que a lo largo de su vida (1484-1531), y posteriormente, se lleva a cabo en la Suiza alemana. Una antología de Ulrico Zuinglio ha de resultar, necesariamente, una aportación más inédita a la bibliografía castellana que las de Lutero y Calvino, por no existir, hasta el momento, precedente alguno. El reformador suizo, históricamente situado con los dos anteriores en la triada de protagonistas más importantes de la Reforma del siglo XVI, demuestra ser, en sus páginas aquí seleccionadas, teólogo, predicador, pastor de almas, pedagogo, renovador político y social, fino estilista en prosa latina y alemana, poeta y músico. Menos impetuoso que "el león de Wittenberg", menos sistemático que Calvino, supera, sin embargo, a ambos en inteligencia natural y les iguala en capacidad de trabajo.
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